Queyras no es sólo un valle, sino también un parque natural regional de los Altos Alpes. El valle atrae a muchos aficionados a la nieve que quieren practicar el esquí y hacer senderismo por el GR 58 y el GR 5.

Los amantes del agua pueden practicar kayak y rafting en el río Guil, de 25 kilómetros de longitud y navegable de mayo a noviembre. Este río ofrece algo para todos los gustos: hay zonas accesibles para principiantes en aguas bravas y otras en las que los expertos pedirán clemencia.

Los escaladores y los aficionados a las vías ferratas encontrarán su saciedad en el parque de Queyras. Algunos de los lugares más populares son: el Pic de Rocherbrune, el Bric Bouchet y el Dent du Ratie. Los principiantes pueden descubrir la escalada en la Roche Ecroulee o la Blanche. También hay numerosas vías ferratas totalmente equipadas en Chateau-Queyras, Arvieux y Ceillaca, accesibles a personas de todos los niveles. Desde todas las rocas se ven privilegiados algunos de los panoramas más espectaculares.

Los amantes de las alturas pueden disfrutar de las vistas desde las alturas con vuelos en parapente y parapente biplaza.

Tanto si busca una escapada rápida de fin de semana como unas largas vacaciones en familia, Queyras lo tiene todo.