Vía ferrata La Hermida, Picos de Europa

A sólo 16 km de Potes, el encantador pueblo de La Hermida alberga una de las vías ferratas más emocionantes de Cantabria. Enclavada en los Picos de Europa, este espacio natural ofrece un marco espectacular para un recorrido deportivo.

La ruta comienza con un tramo fácil para facilitar la ascensión y aumenta gradualmente de dificultad a medida que se asciende. Equipada con peldaños de hierro, cables de seguridad e impresionantes miradores, la vía ferrata sigue la pared de la montaña con unos 200 metros de desnivel. Por el camino, cruzará caminos forestales y se enfrentará a paredes verticales de roca, incluida una pared de 40 metros y una sección colgante de 10 metros que añade un divertido reto al ascenso.

¿Lo mejor de la experiencia? Dos puentes colgantes que ofrecen adrenalina y unas vistas inmejorables sobre el río y el desfiladero. El primero es un sólido puente de cable de 35 metros, mientras que el segundo es un impresionante puente tibetano de 95 metros de longitud, ¡el más largo de este tipo en los Picos de Europa!

Dependiendo de su nivel y preferencias, la ruta ofrece la posibilidad de elegir entre tres tramos tras la subida inicial. Una opción sigue una dificultad similar a la del inicio, otra conduce a través del puente tibetano, y la última -más exigente físicamente- está reservada a quienes tengan experiencia y una excelente forma física.

Esta vía ferrata está clasificada entre K3 y K4, por lo que es adecuada para principiantes deportistas y aventureros de nivel intermedio. Una vez superado el primer tramo, no hay salidas de emergencia, así que prepárate para completar la ruta. Pero no se preocupe: hay paradas de descanso y oportunidades fotográficas a lo largo del camino para recuperar el aliento y disfrutar del paisaje.

Al final de la ruta, un descenso de 45 minutos por un sendero de montaña le devolverá al punto de encuentro. La primera parte del sendero es un poco técnica, pero el tramo final se une a la carretera principal para un final más fácil.

Atención: el punto de encuentro es un aparcamiento público. En verano, puede estar muy concurrido, así que prevea llegar pronto. No hay baños, taquillas ni vestuarios, pero la zona es segura.

Prepárese para una emocionante aventura vertical con vistas panorámicas y uno de los puentes colgantes más impresionantes del norte de España.