Buceo en la Falla de Silfra, Parque Nacional de Þingvellir desde Silfra

Los buceadores certificados con experiencia previa en traje seco están invitados a explorar uno de los puntos de inmersión más excepcionales de Islandia: la fisura de Silfra, en el Parque Nacional de Þingvellir. Esta extraordinaria inmersión en agua dulce le permite descender entre las placas tectónicas de Norteamérica y Eurasia, en una grieta formada por la lenta y continua deriva de estos gigantes continentales. Es una maravilla geológica que no se encuentra en ningún otro lugar del mundo.

Silfra es famosa por su visibilidad, que a menudo alcanza los 120 metros y ofrece una claridad inigualable en aguas filtradas durante décadas por la roca volcánica. Con espectaculares formaciones rocosas esculpidas por el tiempo y la actividad tectónica, no es de extrañar que Silfra esté considerado uno de los mejores puntos de inmersión en aguas frías del planeta.

Su inmersión comienza en el propio emplazamiento de Silfra, donde llegará independientemente 15 minutos antes de la hora de inicio programada. Allí conocerá a su guía de buceo y a un pequeño grupo de compañeros. No habrá más de tres participantes por instructor para garantizar la máxima seguridad y una atención individualizada. La sesión comienza con un briefing detallado sobre la ruta de inmersión, los protocolos de seguridad y la configuración del equipo. Se le proporcionará equipo de primer nivel, incluyendo trajes secos BARE y Aqualung y reguladores APEX o Aqualung.

Una vez que esté completamente equipado, un corto paseo le llevará al punto de entrada al agua. La inmersión guiada dura aproximadamente de 30 a 40 minutos y abarca las cuatro zonas clave de la fisura de Silfra. Comenzará en Big Crack, la sección más estrecha, donde las placas tectónicas están separadas sólo unos metros, perfecta para esa icónica toma de "Entre los continentes". A partir de ahí, la fisura se abre en Silfra Hall, donde los azules vibrantes y la claridad extrema revelan toda la belleza del lugar. A medida que se adentra en la Catedral de Silfra, la parte más impresionante y dramática de la inmersión, sentirá como si volara sobre su caída de 23 metros. Su viaje termina en la tranquila extensión de la laguna de Silfra, de aguas tranquilas e increíble visibilidad.

Tras salir del agua, devolverá su equipo y regresará a la base por un sendero de 250 metros. Allí, su inmersión concluye con chocolate caliente y galletas, una cálida recompensa después de su tiempo en las frías aguas. Una vez que haya terminado la inmersión y haya entrado en calor, regresará a su vehículo y continuará su aventura islandesa.

Para unirse a esta inmersión, los participantes deben presentar una certificación válida de traje seco o una prueba documentada de al menos 10 inmersiones con traje seco realizadas en los últimos dos años, verificadas por un instructor.

Si es buceador titulado, no deje pasar la oportunidad de sumergirse en la Falla de Silfra para vivir una experiencia única. Y si no es buceador titulado, o si nunca ha buceado con traje seco, no dude en optar por el Snorkel en la Falla de Silfra, ¡una actividad igual de extraordinaria!